Confianza y prudencia del sector comercial ante las rebajas

El periodo tradicional de rebajas de verano, que acaba de iniciarse, supone una oportunidad para los comerciantes de recuperar parte de las inversiones realizadas en la compra de productos de temporada primavera-verano, las cuales no se han materializado en ventas en los últimos meses como consecuencia de la paralización de la actividad comercial con motivo de la COVID-19.

En un escenario en el cual las compras se han limitado, entre otras razones, por la reducción de la confianza del consumidor, se observa con incertidumbre su comportamiento al haber sido éste reeducado con motivo del confinamiento. A estas circunstancias se unen la incertidumbre económica y sanitaria.

Esta situación hace que no tengamos previsión alguna sobre ventas que se vayan a producir en rebajas ni estimación de gasto medio de los consumidores, aunque sí que se puede prever importantes descuentos dada la cantidad de género que los establecimientos han acumulado durante el periodo en el que han permanecido cerrados por el confinamiento, por lo que, sin duda, pueden convertirse en unas rebajas muy interesantes para los consumidores.

Por otro lado, Comercio Jaén reclama nuevamente una vuelta a la regulación de los periodos de rebajas, los cuales fueron suprimidos en el año 2012. Ello permitirá volver a competir en esta materia en igualdad a pequeños, medianos y grandes comerciantes.